Hace exactamente un año que empezó “la debacle” de Dani Pedrosa. En Sachsenring, cuando rodabas primero con una ventaja de 8 segundos y en mojado, te caíste. Te estampaste contra las protecciones y te rompiste la mano además de diversas lesiones. Te probaste en Laguna, pero las lesiones no te daban tregua y volviste a casa. Desde Cataluña 2008 sin ganar una carrera. Eso sí, tampoco te bajaste demasiado del podio. Unos neumáticos que no aguantaban lo suficiente. Y cambiaste de marca. El proceso de adaptación fue duro. Y más estando constantemente lesionado. Se acabó la temporada. Tercero. Nada mal, aunque se esperaba más de ti. Sin pretemporada por una lesión. Y llegas a los Test de Qatar y te vuelves a caer. Empeoran tus lesiones y llegas justísimo a la primera carrera. Algunos podios. Pero te vuelves a caer y te haces daño en la cadera. Y en casa corres infiltrado y con mucho dolor. Hace un par de semanas te caíste en Assen en la cuarta vuelta. Ha sido un año muy malo. Lleno de lesiones. De golpes. Sin resultados.Ensombrecido por una moto poco competitiva. Por la caída de Lorenzo que repitieron hasta la saciedad. Por lo fuerte de las Yamaha y las Ducati. Cuando todos daban por hecho que tú estarías fuera de la lucha por el mundial. Te clasificas cuarto. Tal vez las lesiones de Lorenzo y el malestar físico de Stoner te beneficiaran. Pero lo cierto es que, aún estando el resto al 100%, tus salidas son espectaculares. Te pones primero en la primera curva. A 4 segundos de apagarse el semáforo. Y nadie te quita esa posición. Esta vez no. Les vas cogiendo ventaja. Desconfías de una rueda trasera que no se calienta. De una moto que se mueve mucho. Demasiado. Un segundo, dos, tres, casi cuatro. Y pasas por recta y ves -5 en la pizarra. La carrera se te está haciendo corta. Sigues yendo primero. Y llega la última vuelta. Al paso por recta has visto ROSSI 1.7. Y te relajas para no forzar. Pero te relajas demasiado. Y sientes el aliento de Valentino en el cogote. Oyes su motor demasiado cerca del tuyo. Y tumbas algo antes que él para que no te pase. Y cruzas la meta primero. Y ganas. GANAS. A lo CAMPEÓN. A lo DANIEL PEDROSA RAMAL. A TÚ manera. Y Rossi te dice que te lo mereces. Te felicita. Y a mi se me saltan las lágrimas y una sonrisa de extrema felicidad se me dibuja en la cara. La misma que en la tuya. Sientes la satisfacción del trabajo bien hecho. De la victoria. Igual que tu equipo. Alberto sonríe. Tú sonríes. Rossi te abraza en el parque cerrado. Lorenzo te da la mano. Un año sin ganar es mucho tiempo. Un año de lesiones es muy duro. Pero no tienes que rendirte. No tienes que achantarte. Tienes que luchar. Carrera a carrera. Entreno a entreno. Tienes que buscar la mejor configuración para tu moto e intentarlo. Siempre. Ayer fuiste un HÉROE. Un CAMPEÓN. No, SIEMPRE fuiste, eres y serás un CAMPEÓN. Has sido el primer español en ganar en Laguna Seca. Ha sido tu primera victoria del año. Has vuelto a la lucha por el mundial. Cuando nadie confiaba en ti. Cuando todos lo daban todo por perdido. Cuando sólo unos pocos incondicionales seguían defendiéndote a capa y espada de los insultos de unos cuantos. Tu victoria ha sido siempre suficiente para hacerles callar. Y siempre lo será. Eres GRANDE. Eres un CAMPEÓN. Has conquistado Laguna Seca. Has vuelto a lo más alto. De donde nunca debiste marcharte. De donde nunca debiste bajar. Porque tu la victoria es tuya. Pero, aunque las cosas no vayan bien, sabes que puedes contar con nosotros. Y nosotros sabemos que podemos confiar en ti.Porque has vuelto a enseñarme una valiosa lección: nunca te rindas, por mal que vayan las cosas, por larga que sea la mala racha, siempre, siempre, siempre hay que seguir luchando. Ahora sé, con más certeza que nunca, que elegí un buen modelo de conducta. El mejor que podría haber escogido.Hoy me has vuelto a enseñar la razón por la que eres mi ídolo.Hoy he vuelto a sentir lo que es admirar a DANIEL PEDROSA RAMAL. Un pequeño hombre. Un gran luchador.
No hay comentarios:
Publicar un comentario